Las Culturas de Resistencia son expresiones del hacer cotidiano de los Pueblos que persisten ante el vasallaje impuesto por los grupos de poder que ejercen la hegemonía administrativa y operativa de las sociedades contemporáneas.
Esas Culturas Populares son las que permiten la subsistencia de la identidad y pertenencia que dan sentido a la razón de ser a esos grupos humanos que estacionados en la periferia, sostienen la batalla contra la enajenación foránea.
Con autonomía desarrollan una economía cultural generalmente colectiva, sin tutelajes ni mesianismos, porque se generan desde el interés social, participativo y protagónico, lo cual ha permitido su permanencia en tiempo y espacio.
Estos procesos culturales tienen códigos propios que le caracterizan, desde lo estético muy original, hasta lo utilitario, pasando por el sustento cosmogonía que define su sincretismo y riqueza en la diversidad.
Expresiones de esta Resistencia Creadora son por ejemplo: en Guárico las «Loceras del Socorro de la Portuguesa» con más de trescientos años de permanencia, en Lara los «Sones de Negros o Tamunangue» con aproximada circunstancia, en Zulia sur del Lago «Los Tambores Chimbangueles» de igual o parecida ancestralidad.
Así, por toda nuestra América hallamos estas Culturas de Resistencia que nos definen el perfil rebelde e indoblegable ante un Eurocentrismo que aún hoy, 530 años después, pugna por borrarlos del mapa arquetipal de la humanidad.
La Cafunga, el Tambor de agua herencias de la Madre África desde Angola en el Atlántico, los Idiomas de Las Naciones Indígenas de los cuales se enaltece el «Wayunaiki» de la gran Nación Wayúu estado Zulia, cuya Resistencia Creadora Oral se sostiene, las leyendas, cantos de trabajo, mitos y cuentos del vasto Llano, así como la «Cayapa» como expresión colectiva laboral, son apenas una pizca de ese arsenal de manifestaciones Culturales denominadas, junto a amplios sectores de la sociedad (creadores, innovadores, cultores, rezanderos, ensalmadores, etc,) como «CULTURA POPULAR DE RESISTENCIA» cuyos aportes transformadores son invisibilizados a diario por las Industrias Mass Media debido a los Intereses del gran Capital y sus actores hegemónicos en el Poder.
Rafael Arias
(Tepuy Orinoco Médano Mandinga) Abril 2022.
**Las opiniones expresadas en la presente publicación es responsabilidad del autor(a)**